miércoles, 26 de enero de 2011

EL ISLAM Y LA IGLESIA - Parte II

El mundo musulmán ha sido presentado como un enemigo tan formidable que la iglesia ha perdido el ánimo de evangelizarlo. Por el contrario, si nos preparamos para responder a algunas de las cuestiones que los mahometanos plantean, y las convertimos en oportunidades para ampliar nuestra comunicación con ellos, entonces todavía hay esperanzas. En la primera parte vimos algunas preguntas que los mahometanos podrían hacer. Ahora continuaremos con las otras preguntas con sus respectivas respuestas, dadas como sugerencias.


4. ¿No han sufrido corrupción las Escrituras de ustedes?

Un aspecto frustrante de una conversación con los mahometanos es que cuando surge un conflicto entre la Biblia y el Corán, ellos de inmediato señalan que es la Biblia la que ha sufrido corrupción. Por lo general no prestan mucha atención a cualquier evidencia de precisión textual que uno quiera presentarles. Parte del problema viene de la comprensión que ellos tienen del Corán. Si nosotros leyéramos con ellos tales pasajes como las Suras 5.52; 4.45; 24.45; se vería claramente que el Corán confirma la inspiración del Antiguo y Nuevo Testamentos en la época de Mahoma. Vamos a tratar enseguida el problema de la corrupción o alteración de las Escrituras.

Mucha de esta pretensión de corrupción está basada en el pseudo evangelio de Bernabé. Este libro cita a Jesús, quien dice que él no es el Mesías, sino uno que vendría después de él, Mahoma. Los musulmanes sostienen que este hecho fue alterado o cambiado en la Biblia como se conoce hoy. Sin embargo, tanto las evidencias externas como las internas prueban que el libro es falso y de ningún valor para cualquier investigación seria de la verdad. Creo que muchos musulmanes hacen referencia a este asunto sin saber mucho acerca de los hechos.

EL ISLAM Y LA IGLESIA - Parte I

Para animar a los lectores a investigar más acerca de los musulmanes he seleccionado ocho de las preguntas que se hacen con más frecuencia, y también he incluido las respuestas a manera de sugerencias. Esperamos que esto contribuirá a abrir puertas entre los mahometanos.

1. ¿Qué piensa usted de Mahoma y el Corán?

Si usted no sabe algo en concreto, ¡por amor a Dios sea franco y honesto! Esta no es una pregunta cualquiera. Es una pregunta que implica actitudes antes bien que conocimiento. Históricamente, hay un precedente para la cuestión. En el siglo XII, Niceto Coniates, un gobernante bizantino, decretó que para que un musulmán pudiera convertirse al cristianismo tenia que maldecir a Mahoma y a Alá en el bautismo. Hoy mismo, en el siglo XX, hay escritores que han identificado al Islam con el diablo y el anticristo. Había un gran debate entre los misioneros de siglos anteriores para determinar si el Alá del Islam fuera realmente el Dios de Abraham. Existían teorías de que el Islam había comenzado como una secta cristiana en Arabia, y que por lo tanto era una herejía.

El mundo cristiano sufrió pérdidas sustanciales con la expansión del Islam. Después del fracaso de las Cruzadas, se desarrolló una actitud negativa contra los musulmanes en el Occidente, mientras se recobraban de las heridas de la derrota. Querían convencer al mundo de que la única razón por la cual triunfó el mahometismo fue por la fuerza de la espada.

martes, 11 de enero de 2011

La Agonía de Cristo

Lucas 22 : 44 — Y estando en agonía, oraba más intensamente; y era su sudor como grandes gotas de sangre que caían hasta la tierra.

En su estado original, nuestro señor Jesucristo era sobre todo sufrimiento, porque Él era “ Dios sobre todo, bendecido para siempre”; pero cuando se hizo hombre, no solamente fué capaz de sufrir, sino que tomo parte en esa naturaleza que es en verdad débil y expuesta al sufrimiento. La naturaleza humana por su debilidad, es comparada en las Escrituras al pasto en el campo, que fácilmente se marchita y muere. También es comparada a una hoja y a la hierba seca, y a una rafaga de viento, y a la débil naturaleza humana, que es polvo y cenizas, que tiene su fundacion en el polvo, y que puede ser desecha por la polilla. Esta fue la naturaleza, con toda su debilidad, y exposicion al sufrimiento, a la que Cristo, que es el Señor Dios omnipotente, puso sobre Él. ÉL no tomó la naturaleza humana en Él, en su primer, más perfecto y vigoroso estado, la tomó en el estado débil, y desauciado que fué después de la caída; por eso Cristo es llamado “una delicada planta”, y “ una raíz de tierra seca”. Isaias 53:2. Subirá cual renuevo delante de Él, y como raíz de tierra seca; no hay parecer en Él, ni hermosura; le veremos, mas sin atractivo para que le deseemos. Así, la principal tarea de Cristo en el mundo era el sufrimiento, así que, en concordancia con esa tarea, Él vino en esa naturaleza y con las circunstancias, porque todo eso podía permitir que sufriera; así que toda su vida estuvo llena de sufrimiento, empezó a sufrir en su infancia, pero el sufrimiento creció a medida que llegaba al final de su vida.